MIS 3 MAYORES RETOS:
Hoy os voy a contar cuáles han sido mis tres mayores retos de este año 2023, que ya está llegando a su fin. Y lo voy a hacer sin cortarme. Avisados/as estáis 😉
Como director de la agencia, uno de los mayores desafíos cuando Siete Olas comenzó su verdadera consolidación al comienzo de 2023 fue ser consciente del cambio de mi rol o funciones que estaba llevando a cabo y que son vitales para lograr el crecimiento sostenido que hemos tenido. Comencemos por el principio; me encanta mi trabajo, me encanta analizar marcas y preparar estrategias o campañas para lograr los objetivos que nos piden, o que definimos desde la agencia para ellos. Creo que es mi motivo principal, y donde más a gusto me siento trabajando: vamos, lo que suelen llamar la zona de confort.
El año 2022 acabó muy bien en términos de proyectos y facturación, y 2023 también prometía. Y así ha sido. Algo que comento siempre en las reuniones de seguimiento es la importancia de estar abiertos y proactivos de cara a oportunidades que surgen, pues la manera en la que acabamos un año, poco tiene que ver con la manera con la que lo empezamos. Es cierto que somos una empresa joven y esto es más sencillo los primeros años. Pero, a mí, especialmente, es algo que me pone.
Y este 2023 pasó exactamente lo mismo: enero de 2023, todo muy lento y poco movimiento en el sector, se me activan las alarmas «porsiaca». Febrero, muchas llamadas, muchas reuniones y comienzo de activación de todo. Y este año, desde entonces, ha sido un no parar. Generalmente, en agosto tenemos una tregua, ¡pero este año ni mucho menos! Y me dirás, ¡que sí, pesado! Pero háblame de los 3 retos que dijiste… y a ello voy:
El primero es confiar plenamente en el equipo y que ellos lo van a hacer mejor que tú. Creo que a todos los que formamos un equipo nos ha pasado. Comenzamos a delegar, pero nuestro pequeño «orgullito» nos dificulta el proceso pensando que nadie lo sabrá hacer como tú…. ¡ERROR! Si seleccionas tus compañeros/as de trabajo correctos, su especialización te hará ser mil veces mejor.
Esto nos lleva al segundo punto. No des por supuesto las cosas, y no pienses que todo el mundo piensa o debe pensar como tú. Explica, forma, reúnete y vuelve a explicar. La clave es la comunicación interna del equipo. Y créeme, somos solo 8 personas y es donde más hay que poner el foco. Y donde más se nota la mejoría (creo que la Ley de Pareto sabe algo de esto…) Y por último, deja margen al error, pero siempre con aprendizaje. Siempre va a haber errores, hay que asumirlos, pero sobre todo sacar aprendizaje de ello. Algo muy habitual es que nuestro «orgullito» no nos permita ver que la hemos cagado y busquemos excusas. ¡Cero Excusas! Lo importante es identificar el error y buscar siempre al menos dos soluciones al mismo. De esa manera, si volvemos a encontrarnos en una situación parecida, ya habremos sabido valorar cómo esquivarlo.
Te parecerán retos sencillos, incluso insulsos, pero te puedo asegurar que la clave del funcionamiento de una empresa, o al menos de la nuestra, se centra en estos tres. Su correcta gestión va a desencadenar el combustible necesario para que lo demás funcione: que el equipo entienda su trabajo, que encuentren su lugar y con estas dos, su motivación. Y con ello, que todos busquemos el mismo objetivo. Y así, es cuando surge la magia.
Hoy me he quedado sin tiempo, pero el próximo día prometo profundizar en los procesos más internos de la agencia. Sed felices! 😉